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Fuente: Finances Hebdo (en francés)
Se identifican nuevas variedades resistentes a la
plaga de insectos. Se ha adoptado un programa de plantación progresiva,
que cubre el período 2021-2030.
El cactus es una planta que lleva siglos presente en Marruecos. Hace
unas décadas, su cultivo se consideraba secundario, sirviendo para
cercas agrícolas o protección contra el viento. Su fruto, conocido como
"higo chumbo", comúnmente llamado "Handia", es muy valorado por sus
cualidades nutricionales. Los aceites esenciales extraídos de esta
planta tienen un gran valor terapéutico y cosmético. El litro de aceite
puede superar fácilmente los 1.000 euros en Europa.
Catus (Opuntia ficus-indica) con higos chumbos.
Este éxito ha asegurado una fuerte expansión para este sector,
especialmente porque es altamente resistente a la sequía y se recomienda
para terrenos montañosos con suelo pobre. Al no requerir un tratamiento
particular, asegura un rendimiento por hectárea que puede llegar
fácilmente a 20.000 DH, superior a los cultivos más practicados, en
particular cereales y legumbres. Pero, en 2014, un fenómeno tendrá un
impacto severo en la industria: es la cochinilla del cactus, un insecto
que hace que la planta muera rápidamente.
El primer brote apareció en Sidi Bennour en la región de Doukkala, antes
de que surgieran otros en varias regiones del Reino. Algunas granjas
han sido totalmente diezmadas a la velocidad del rayo. En ciertas
regiones que dependen en gran medida de este sector, como Ait Baâmrane,
perteneciente a la provincia de Sidi Ifni, o incluso Rhamna, Chichaoua y
Youssoufia, los agricultores han perdido más del 50% de sus ingresos.
Para hacer frente a esta plaga de insectos, el Departamento de
Agricultura ha tomado medidas para llevar a cabo de manera urgente un
programa de control. Las acciones de intervención se refieren en
particular al tratamiento químico, la destrucción de plantas infestadas
y, sobre todo, el despliegue de variedades resistentes. El Instituto
Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INRA) ha lanzado intensas
actividades en esta área, en alianza con otras organizaciones
dependientes del departamento supervisor como ONSSA, la Oficina Nacional
de Asesoramiento Agropecuario (ONCA) y las delegaciones regionales de
agricultura así como ORMVA.
El programa tiene como objetivo desarrollar ocho variedades resistentes a
la cochinilla que figuran en el catálogo oficial. “La colección de
variedades de cactus que el Instituto ha agrupado durante años ha
permitido seleccionar 8 variedades resistentes de unas 400. Hay que
decir que el programa de I+D requiere mucho tiempo y esfuerzo para
alcanzar los objetivos esperados. Hemos favorecido esta solución de
control biológico en detrimento de los productos fitosanitarios, porque
los chumbos son productos locales. Los resultados obtenidos son muy
alentadores”, indica Fawzi Bekkaoui, director del INRA.
El programa de control también prevé la distribución de estas
variedades, priorizando las regiones más afectadas. “Gracias al
principio de agricultura solidaria, se ha puesto en marcha un programa
progresivo de distribución de plantas resistentes a la cochinilla en
beneficio de los pequeños fellahs más impactados que cubre el período
2020-2030”, indica Abdelaziz Bousraref, director regional de la
delegación de Agricultura de Marrakech-Safi.
Cabe recordar que Marruecos ha firmado acuerdos de cooperación en el
campo de la I+D, en particular con la Organización Mundial de la
Agricultura y la Alimentación (FAO). Se trata de asistencia técnica
relacionada con el control de infestaciones y el fortalecimiento de las
capacidades institucionales nacionales y las capacidades técnicas de
todas las partes interesadas, en particular las estructuras de
protección fitosanitaria, y los agricultores para aplicar las medidas
fitosanitarias adecuadas. Y prácticas para controlar la infestación y
limitar la propagación de esta plaga plaga.
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