Fuente: Historia Desterrada (Blog)
Crucero Canarias. José María González, Almería, 1969.
El 23 de noviembre de 1957, bandas armadas del Ejército de Liberación
Nacional lanzaron una gran ofensiva sobre Ifni -enclave
costero español-, ocupando todo el territorio salvo su capital, Sidi
Ifni. El Ejército de Liberación no formaba parte del ejército regular de
Marruecos. Era el brazo armado del Istiqlal, partido
independentista marroquí, el cual no se había disuelto a pesar de que
Marruecos ya era un Estado independiente desde 1956. Los 50.000 hombres
armados del Ejército de Liberación que permanecían en el sur de
Marruecos podían ser un problema para el monarca Mohammed V. Sin
embargo, éste decidió hacer suyas las tesis expansionistas del Istiqlal, basadas en la creación del Gran Marruecos a costa de Ifni, Sáhara, Ceuta, Melilla, Mauritania y el occidente de Argelia.
El apoyo de Mohammed V y sobre todo, de su hijo, el futuro Hasán II, no
fue abierto, por temor a ganarse las iras de las potencias coloniales de
España y Francia. Más al contrario, desde las sombras, proveyeron
armamento de origen francés, estadounidense y español al Ejército de
Liberación. Debemos señalar que, desde comienzos de 1957, las bandas
armadas del Ejército de Liberación habían emprendido ataques aislados
contra tropas españolas tanto en Ifni como en Sáhara. Solo eran tanteos.
En la ofensiva del 23 de noviembre, las limitadas guarniciones
españolas poco pudieron hacer, cayendo la mayoría de los puestos
fronterizos salvo los principales, que quedaron cercados. A ojos de
Mohammed V, la facilidad con que se ocupó el territorio de Ifni -salvo
su capital- demostraba la debilidad española. Había sido tan sencillo
que el monarca alauí comenzó a plantearse un apoyo más directo al
Ejército de Liberación.
Entre finales de noviembre y comienzos
de diciembre, los españoles -contando con nuevos refuerzos- ejecutaron
varias operaciones dirigidas a la liberación de las tropas cercadas,
para proceder seguidamente a un repliegue sobre la capital, Sidi
Ifni, cuyo perímetro se vio reforzado. Al tiempo que se ejecutaba la
«Operación Gento», se detectaron movimientos
de tropas de las Fuerzas Reales de Marruecos en la frontera. Los
informes de
inteligencia señalaban la posibilidad de un nuevo ataque del Ejército de
Liberación
reforzado con tropas de las Fuerzas Reales, a partir del 11 de
diciembre.
La actitud del envalentonado monarca marroquí tenía cierta
justificación: la inoperancia mostrada por el Gobierno español a lo
largo de todo el año 1957 -en parte limitado por un contexto
internacional fuertemente anticolonialista- parecía significar que
cualquier tipo de acción no tendría respuesta por la parte española. Y
posiblemente fuese así. A la altura de 1957/1958, España seguía siendo
un país pobre y carente de todo tipo de medios. Su ejército, denominado
por Gabriel Cardona como gigante descalzo, operaba con un
armamento obsoleto, proveniente de la Guerra Civil y, en el mejor de los
casos, de la Segunda Guerra Mundial. Pero el Gobierno de Madrid,
consciente de que era necesario calmar los ánimos marroquíes, decidió
ordenar una acción disuasoria.
De este modo, el 7 de diciembre comenzó una demostración naval en el puerto marroquí de Agadir. Los cruceros Méndez Núñez y Canarias, junto a los
destructores José Luis Díez, Gravina, Almirante Miranda y Escaño,
apuntaron su artillería contra la ciudad, en la cual hubo gran alarma. En
determinados edificios se izaron banderas de diversos países para no ser
agredidos en caso de que se abriese fuego. Las Fuerzas Reales de Marruecos se
desplegaron en el puerto, temerosas de una acción de desembarco, mientras en
Rabat ordenaban el envío de refuerzos.
La demostración de fuerza cumplió su objetivo ya que demostraba que las
autoridades españolas habían abandonado su letargo. A partir de
entonces, Mohamed V olvidó la idea de una invasión formal, adoptando una
nueva
vía negociadora y regresando a sus anteriores postulados de apoyo en la
sombra
al Ejército de Liberación. Resulta interesante la descripción de Ricardo
Álvarez-Maldonado:
"Puede calificarse de acción de presión resolutiva en un ambiente de
crisis al borde de la escalada, que conducía a un enfrentamiento
directo con Marruecos. Nadie podía sospechar que unos barcos viejos
próximos al desguace pudieran, con su presencia y amenaza de empleo de
la fuerza, prestar tan gran servicio."(1)
En el mensaje de fin de año, Franco disculpó al Gobierno de Rabat de los
acontecimientos de Ifni y Sáhara, acusando al comunismo internacional de
financiar y organizar al Ejército de Liberación.
(1) ÁLVAREZ MALDONADO.R., p.30.
FUENTES
ÁLVAREZ-MALDONADO, R.: "50 Aniversario del conflicto de Ifni-Sáhara", Revista General de Marina, enero-febrero 2008, pp.7-30.
DIEGO, J.R.: "Ifni. La última guerra colonial española. Historia del desconocido conflicto de 1957-58 en el África Occidental", Historia 16, vol.167, 1990, pp.12-37.
FERNÁNDEZ-ACEYTUNO, M.: Ifni y Sáhara, una encrucijada en la Historia de España. Palencia. Simancas Ediciones, 2001.
PROCEDENCIA DE LA IMAGEN
Los Barcos de Guerra de Eugenio
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